Jorobados


Hemos celebrado el año internacional del gorila (2009), el del microcrédito (ya no pongo fechas), el de las cuevas, el año polar, el del veterinario, el de la quinua, el del leopardo de las nieves, estamos en el del mijo y el 2024 será el de los camélidos.

Los chicos de la ONU que van con traje por el Midtown de Manhattan han aprobado la resolución 72/210 que declara el Año Internacional de los Camélidos, 2024. Los han debido ver muy jorobados.

 “Observando que los camélidos son mamíferos ungulados artiodáctilos estrictamente herbívoros, que aparecieron por primera vez en América hace 45 millones de años”. Este es el primer considerando firmado por la Asamblea.

Llevo tiempo pensando que la ONU podría hacer algo por Ucrania, por la baja natalidad, por las madres, por la educación… incluso llevo dando vueltas a un año internacional de la madre más que celebrarles sólo un día. Algo, ya que la ONU fue creada al término de la 2ª Guerra Mundial para «mantener la paz y seguridad internacionales». Pero me encuentro con esto. Y sigue.

 “Observando además que los camélidos constituyen el principal medio de subsistencia para millones de familias pobres que viven en los ecosistemas más hostiles del planeta, y que contribuyen (…) al empoderamiento de las mujeres» (?!) No logro ver la relación, pero es que no soy funcionario de la ONU.

“Reconociendo que (…) constituyen una importante base social de los conocimientos tradicionales y contemporáneos de esos pueblos”. Los camellos de toda la vida son una base social, los de ahora no lo sé, porque sólo los veíamos en algunas cabalgatas, que era cuando se lucían, pero ahora ya no.

“Recordando la urgente necesidad de aumentar la concienciación pública sobre la importancia de los camélidos…”. ¡Hablamos de “urgente”, o sea, de adoptar incluso medidas cautelares que incluyan a los dromedarios!

Escribo esto porque estaba pensando en mi próximo artículo, que saldrá en unos días sobre algo quizá no tan importante ni urgente: la maternidad. Pero ya veo que hay cosas más importantes y más urgentes en la ONU.

Adrianey Arana    ·     Foto de Saj Shafique en Unsplash