El olor a libro nuevo de septiembre es otra noche de Reyes. El inicio de las clases, la ilusión de estrenar, las historias que vendrán… Mamás que sueñan y dejan a sus hijos con los ojos brillantes. Niños dormidos absolutamente despiertos. Zapatos nuevos. Mochilas con dibujos y colores. Padres que respiran y confían en su hijo.. no en el colegio, ni en los profesores, ni en el sistema. Saben que su niño o niña se hará mayor.
Horarios cambiados, nervios, rutinas que todavía no lo son, pero que mamá quiere que sean. "Papi te quiere mucho" repiten algunos como en el andén de una estación. "Tu familia no te olvida"… casi. Porque el niño inicia su mundo, no el de ellos. Empieza de nuevo el camino hacia su propia vida. Pero eso mismo, aunque cueste, es lo que sus padres desean. Y que sea feliz.
No comienza esta semana la vuelta al cole, ni el descanso de los padres, ni la actividad escolar: recomienza la ilusión de una niña o de un niño que quiere volar para regresar al nido en un vuelo cortito, pero con sus alas. Y mirar con sus ojos. Y aprender la libertad.
(Adrianey Arana)