Realidad aumentada

 

La realidad aumentada nos hace ver mejor y más la realidad, o sea que no la cambia, la aumenta. Es la actitud que se nos pide hoy. Exagerar. Por ejemplo, las frases de cariño (porque no hay muecas, ni viajes de regalo), los arqueos de cejas, los saludos y las despedidas.

No vale estar en casa como siempre, escuchando lo que me dice el otro mientra miro el móvil. No, ahora hay que escucharle con los ojos.

Hay que aumentar la realidad: que es que somos una familia y nos queremos, a pesar de no ser la familia cool que gestiona la crisis de modo guay en plan instagram.

A mi nadie me entrenó para un pandemia mundial de años. Por eso, relativizo mis fallos. Soy un desastre en pandemias y “actitud”.

Pero estoy aprendiendo que hay que exagerar el cariño que la tengo a mi gente para que lo noten. Tirar más de lenguaje corporal. Y de “lenguaje-lenguaje”: practicar frases amables, preguntas corteses y palabras bonitas.

Como actores de teatro que exageran la voz y los gestos para que la obra se vea como es.

Anara Yenairda