Gurulandia

“Padres felices, hijos felices”. Obviedad en boca de los gurús educativos de moda que salen hasta de debajo de las piedras. Abres Facebook y un gurú te dice que “los hijos bien educados tienen más posibilidades de éxito que el resto”. Lo afirma un tipo con jersey-ceñido-americana y micro-pinganillo en la cara. 

Si miras Twitter, el valle del postureo global, los gurús suelen escribir mensajes del estilo: “los hijos de padres innovadores son más creativos”. Si es un blog o un diario digital: “Willian Pérez, experto en ‘learning’, afirma que los padres deben pasar tiempo con los hijos”.

La invasión de gurús que predican obviedades es de agradecer en el incomprensible mundo educativo que nos hemos creado pedagogos, educadores y legisladores en el último siglo. Aunque algunos gurús resulten ridículos, la mayoría aportan aire fresco. Carentes de títulos muchos de ellos, son sin embargo “expertos en humanidad”, algo tan escaso en esta parte del occidente. Por eso, casi todos sus mini videos ‘inspiran’ al menos cierta paz. 

Porque nada relaja más que saber que ser padre, profesor o educador no es tan difícil. No hay más que ser normal. Y pensar que “los hijos con padres sonrientes suelen ser más felices en la adolescencia” y que es mejor no usar constantemente el móvil cuando estás con tu hijo si quieres evitar que te imite”. Y es que, como dice la canción de Intoxicados, “todo es tan fácil que se hace difícil”

Adrianey Arana

 

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Por una escuela atractiva

     Dicen que J.K. Rowling se inspiró en la George Heriot’s School para crear Hogwarts. Este precioso colegio para huérfanos de Edimburgo con cuatro 'casas' que compiten entre sí es el lugar al que todos desearíamos acudir o mandar a los hijos. A un colegio inglés al fin y al cabo, porque Inglaterra es un país fundamentalmente escolar.

     El profesor Peter Dolton, en su estudio Global Teacher Status Index, dice que el estatus o prestigio de los docentes se mide de forma diferente "en función de la historia y los valores y las costumbres de una cultura particular". Afirma que en Nueva York la sociedad prima los ingresos financieros, por lo que allí tuvo que medir el estatus del maestro por su salario. En China, en cambio, los maestros tienen un prestigio mayor a pesar de no corresponderse con el dinero.

     Pero más decisivo que el estatus del profesor es el prestigio de la escuela en general. En un país escolar sus colegios son los más bonitos del mundo y su educación es imitada, copiada y fuente de inspiración para novelas y películas. Eton es símbolo de todo un país al igual que Hogwarts

     En USA sucede algo similar. El bus escolar amarillo es un símbolo nacional, una institución. Los high school americanos públicos o privados son la envidia de todo adolescente. De ahí que el que pueda manda a su hija a hacer un año de bachillerato a Estados Unidos. Y claro, va encantada. Y es que sus campos de fútbol y sus canchas da basket son 'chulas'. Así de sencillo. Y lo mismo ocurre en Corea del Sur, etc. y otros países que valoran sus escuelas.

     En España no hace falta un día del orgullo escolar, sino arquitectura, arte, cuidado e ilusión. La estética escolar es prioritaria, no sólo el currículum. El comedor escolar, la jardinería, el diseño de la equipación deportiva han de ser atractivos. Aprendamos del estilo del fútbol en España. Aprovechemos para que deporte, estética y educación vayan unidos, como lo van en otros países.

     Educa lo que se ve, lo que se hace, lo que se vive… y lo que emociona. Lo atractivo atrae. La belleza educa. Es cierto que lo que más forma es el trabajo bien hecho, pero eso ya es algo estético. Quizá así la camiseta y la mochila del cole sean más valoradas entre nuestros alumnos que las del Real Madrid.

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Olor a libro nuevo

 

    El olor a libro nuevo de septiembre es otra noche de Reyes. El inicio de las clases, la ilusión de  estrenar, las historias que vendrán… Mamás que sueñan y dejan a sus hijos con los ojos brillantes. Niños dormidos absolutamente despiertos. Zapatos nuevos. Mochilas con dibujos y colores. Padres que respiran y confían en su hijo.. no en el colegio, ni en los profesores, ni en el sistema. Saben que su niño o niña se hará mayor.

      Horarios cambiados, nervios, rutinas que todavía no lo son, pero que mamá quiere que sean. "Papi te quiere mucho" repiten algunos como en el andén de una estación. "Tu familia no te olvida"… casi. Porque el niño inicia  su mundo, no el de ellos. Empieza de nuevo el camino hacia su propia vida. Pero eso mismo, aunque cueste, es lo que sus padres desean. Y que sea feliz.

      No comienza esta semana la vuelta al cole, ni el descanso de los padres, ni la actividad escolar: recomienza la ilusión de una niña o de un niño que quiere volar para regresar al nido en un vuelo cortito, pero con sus alas. Y mirar con sus ojos. Y aprender la libertad.

(Adrianey Arana)